Celtas Cortos cumplen 40 años sobre los escenarios y lo celebran con el disco “El mundo del revés”, cuya gira les lleva hoy hasta Cabral, donde serán los protagonistas de la fiesta de la Virxe das Dores.
¿Cómo afrontaron el proceso de creación de este álbum?
Justamente ha sido diferente a todo lo que hemos hecho porque se empezó en 2021 y lo que fuimos haciendo fue sacar temas sueltos en las plataformas cada tres meses. Al final, en un par de años había seis temas y el año pasado decidimos crear otros siete y juntarlos todos. Ha sido un proceso un poco largo para lo que nosotros acostumbramos.
Musicalmente, ¿se diferencia mucho de sus otros trabajos?
Siempre intentamos darle una vuelta de tuerca a nuestro sonido. Nuestra filosofía de fusión que nos invade desde siempre nos lleva a darle un toque diferente. En este caso, lo más llamativo pueden ser esos cinco temas grabados con arreglos para una orquesta de cámara, en concreto Virtuós Mediterrani, de Alicante. Por lo demás, el sonido de Celtas de siempre está ahí y se reconoce.
¿Se quedan con alguno de estos temas en especial?
El single que lanzamos este año que da título al disco es una canción que dice mucho de cómo vemos el mundo actual desde nuestra perspectiva, con muchos años a la espalda y muchas cosas vividas. Tenemos esa sensación de que está todo dado la vuelta y que muchas cosas que se tenían que haber hecho mejor o aprendido de ciertos errores, parece que no hay manera de hacerlas bien. Y el ritmo frenético de la tecnología y lo virtual, que parece que lo hace todo muy poco natural. Sentimos que el mundo está dado la vuelta y esta canción es un reflejo de cómo lo vemos. Y otra, “Sólo ante el peligro”, que es un tema más íntimo y emocional, también es muy especial.
¿Les sorprendió ser uno de los grupos más exitosos de España tocando un género como el folk?
Es algo impensable, y cuando empezamos no teníamos ni idea de cómo funcionaba este mundo. Tuvimos la fortuna de juntarnos gente dispar y salió esta mezcla de folk-rock que a principios de los 90 no era para nada popular a nivel de éxito radiofónico. Por lo que sea, nos colamos en las radiofórmulas en esa época y a la gente le llamó la atención porque apenas se escuchaba algo así a nivel comercial. Rompimos moldes, oír una flauta o un violín en las cadenas de radio principales era muy novedoso; y unido a las letras nos hizo ser pioneros en un sentido. Y seguir aquí después de 40 años es un privilegio. Estamos viviendo otra juventud tras el parón de la pandemia.
¿Qué les parece el público de Vigo y el ambiente de la ciudad?
Ir a Galicia para nosotros siempre es interesante. Uno de nuestros miembros está muy ligado a Vigo –Antón Davila, de Bueu–. Y además, mucha gente después de tantos años todavía piensa que somos gallegos y nos llama la atención. Aquí nuestra música cala mucho y sabemos que nos tienen mucho cariño, siempre son conciertos muy especiales y muy efusivos, la gente disfruta mucho de este tipo de música. En Cabral buscaremos conectar con la gente y disfrutar durante un par de horas con ellos.
¿Qué tipo de concierto pueden esperarse los que se acerquen a Cabral?
La mitad del repertorio que estamos tocando este año son clásicos, las canciones que todo el mundo espera en uno de nuestros conciertos. Y con la otra mitad, jugamos a meter temas instrumentales o alguno antiguo que nos dan mucho juego, y también meteremos algunas canciones del disco nuevo, cuatro o cinco.
El panorama musical español ha cambiado mucho en 40 años, pero Celtas Cortos siguen ahí. ¿Qué les parece el estado actual de la industria?
Habría que diferenciar dos partes. Una sería la cantidad de músicos y de música que se hace en este país, que sigue estando en un estado de forma increíble. Hay gente buenísima y proyectos muy itneresantes. La otra es lo que se oye, lo que llega a través de la radio, que es la vía más directa de escuchar música, y que ahora mismo está ‘tomada’ por el tema comercial reguetoniano y también por la escena anglosajona, por lo que es muy difícil meter la cabeza ahí con proyectos un poco diferentes en España. Está internet y las plataformas, pero es muy difícil llamar la atención si te sales un poco de lo que se lleva.